Artista, investigadora y facilitadora de experiencias que involucran las artes de movimiento, técnicas somáticas y ecología. Su práctica mezcla herramientas de las artes escénicas junto con conocimientos en naturalisme, lo cual ha derivado en su acercamiento a la ecosomática y ecoperformance.


Se egresó del programa Danza Abierta - Universidad de Costa Rica y realizó estudios en The Danish National School of Performing Arts, Dinamarca, donde incursionó en técnicas de movimiento somático y performance in situ. En ese país residió durante 7 años y participó en diversos proyectos, festivales y colaboraciones internacionales. Resaltan el proyecto del barco Hawila, “Sailing City” sobre cambio climático presentado en CLICK Festival contemporary art, science and technology en Helsingør y el festival “Genesis on water – Performance Art Festival” en Copenhagen (2019) en donde realizó instalación de videos subacuáticos “One Breath Hold”. También ha participado en encuentros, festivales y laboratorios de movimiento en Tailandia, Cuba, México, España, Alemania y Portugal.




Durante casi 20 años ha trabajado como Guía Naturalista, lo que la ha acercado a sus distintas manifestaciones y a desarrollar la observación y la escucha. Esos conocimientos los ha incorporado a su práctica artística en la que actualmente deriva en la ecosomática


Los últimos 12 años, ha investigado formas de habitar paisajes, especialmente los acuáticos, a través de la improvisación de contacto en el agua, la danza profunda (utilizando técnicas de buceo libre) y el cuerpo líquido. A partir del trabajo con el agua, ha incorporado la videodanza, el videoarte y fotografía submarina a sus prácticas. También se interesa por el aspecto terapéutico en el agua y se ha formado en Aguahara y Aquatic Body waves. Fue conferencista invitada del II Congreso Internacional de Terapias Acuáticas-Costa Rica 2018.



Desde el 2020, a su regreso a Costa Rica, se ha dedicado a crear experiencias colectivas de exploración con ecoperformance, principalmente en el Caribe Sur, en Monteverde y en el Golfo de Nicoya. Actualmente sus investigaciones exploran el movimiento y la performance desde la embriología, así como las particularidades del paisajes y el ser tropicales.


A través de su práctica, ejerce un activismo vivencial y desde la memoria que parte de la consciencia de ser naturaleza y de que el agua es el lugar de origen de los seres vivos. Este activismo se manifiesta en un reconocimiento de la naturaleza como un hogar, un lugar que da pertenencia porque es el lugar del origen. Utiliza la observación y la escucha del entorno para establecer vínculos con cada lugar con la intención de entrar en sintonía con ese espacio.


Consecuencia de la modernidad occidental se establece una separación entre los seres humanos y la naturaleza, por esto, su práctica se basa en establecer una comunicación con el entorno. La creación de espacios, cuidados y seguros, para compartir esa forma de relacionamiento, es otra de las maneras en las que se manifiesta su trabajo artístico, generando experiencias, tanto individuales como colectivas, que son ecológicas y a la vez poéticas, de las cuales emergen formas de intimidad con la naturaleza, sensorialidad y posibilidades expresivas.


Esta tipo de prácticas se nombran como ecoperformance, es decir, acciones que suceden en contacto con entornos naturales. El ecoperformance vendría siendo una práctica ecofeminista centrada en el deseo de compartir, de observar, de escuchar y que guarda distancia con las prácticas consumistas y extractivistas, que sólo desean tomar del entorno en vez de establecer relaciones de reciprocidad y cuido con él.




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